Necesitamos la Comisión de la Verdad
Magdalena, una bella e inteligente joven, hija menor de Víctor Manuel Díaz Cordero (Cecilio, Manuel), sufrió fuertes embates de la represión policial.
Reside en Los Alcarrizos, en una humilde vivienda que servía para la preparación de pastelitos, que era su fuente de sustento
Estaban buscando a su padre y se la llevan secuestrada, donde le aplican diferentes torturas, incluyendo colocarles bloques de hielo en las manos hasta perder la epidermis.
El secuestro de un familiar es un práctica común de la Policía, cosa que se ha ido reduciendo..
En otra ocasión están detrás de su padre y vuelven y la secuestran, y la trasladan a una vivienda en la cercanía del Puerto Caucedo, propiedad de un alto oficial de la Policía.
Ahí la mantienen con una funda negra en la cabeza o con la cara tapada todo el tiempo, lo que le dificultaba la respiración.
Una sola y pequeña ración alimenticia y poca agua le administraban los responsables de su custodia, de su crueldad.
Dormir estaba prohibido, dormía cuando los vigilantes "echaban su pavita".
Tres oficiales superiores "Diverge, Liriano y Minier, con unos alistados, eran su compañía
Esta vivienda después fue remodelada, con el cambio de pintura y subir un bloque más la pared del frente.
Un oficial se negó a matarla y la despachó viva en El Mamón del Toro, en Santo Domingo Oriental, después del asesinato a mansalva de su padre.
Esta joven hoy es médico, ejemplar ciudadana que tiene, desgraciadamente, que convivir como muchos traumas producto de las severas torturas que padeció entre septiembre y octubre de 2009.
Este es otro penoso y aborrecible hecho que tiene que investigarse, para traducir a la justicia sus responsables.
Comisión de la Verdad, Ya…!