Por Claudia Fernández
La Alianza Dominicana Contra la Corrupción (ADOCCO) ha puesto el dedo en la llaga, al cuestionar que tanto policías y militares, que tienen a su cargo la vigilancia y cumplimiento de los protocolos establecidos para frenar la pandemia del COVID-19, durante el toque de queda, con la debida complacencia del Ministerio Público a cargo, violentan lo que establecen la Constitución y las leyes, que dejan en manos de los jueces el adjudicar las sanciones debidas.
Pero, además, una de las partes más importantes es que la entidad pregunta, a donde ha ido a parar la cantidad de dinero recaudada por las autoridades mencionadas y en qué se utiliza este dinero, que según cálculos de Julio César de la Rosa, presidente de ADOCCO, supera los 500 millones de pesos, por lo que será interesante que los jefes militares y del Ministerio Público, explicaran el destino final de estas recaudaciones.
Si van al Ministerio de Salud Pública, es preciso que la entidad explique el por qué permite que se viole lo que establece la ley orgánica de Salud, pero lo mejor será ver qué se está haciendo con ese dinero, que, se cobra en efectivo. ¿Estará en las arcas del Banco de Reservas o en los bolsillos de algunos particulares? ¿Quién le pone el cascabel al gato? No creemos que sea el ratón.