Relámpago Informativo DONDE LAS NOTICIAS LLEGAN PRIMERO
El crimen de odio, la discriminación en cualquiera de su manifestación, contagió a una diminuta ciudad, próxima a Australia.
Fanáticos supremacistas blancos, sembraron de muertos a religiosos que se concentraban en dos templos en Nueva Zelanda.
Sólo el odio racial, podría ser la única explicación de los asesinos de religiosos, quienes de seguro copiaron lo que ya es una modalidad en Estados Unidos.
Extrañaría a muchas personas la elección de escenarios de los criminales al momento de sembrar la muerte. Escuelas con niños indefensos, negocios donde la homofobia ha sido la motivación, ataque a lugares donde se vitorean a grandes artistas…
¿Por qué los asesinos de multitudes eligen sanitarios de inocencias, y cómo tienes acceso las armas de destrucción masiva? Simple, por la protección y la facilidad de quienes se sienten superiores desde las alturas del poder.
Hemos vistos la facilidad con que se adquieren las armas, también como se expande la homofobia por doquier.
Es posible comprender por qué el odio racial llega a una ciudad más pequeña que la capital dominicana, y ello, sin que el negocio de las armas se detenga.
Aunque el supremacista blanco ponderó y alabó al presidente Donald Trump, el mandatario condenó la masacre.
