“Ayúdame a salvar una vida”
Hola amigos, ¿qué tal? Pienso que una de las pruebas mas fuertes que Dios pone en nuestro camino es el de perdonar a quien nos ha hecho daño.
“Perdona nuestras ofensas, así como también perdonamos a los que nos ofenden”, decimos cada día en el Padre Nuestro, pero… ¿lo llevamos a cabo en verdad?
“Yo perdono, pero no olvido”, decimos muchas veces, “le he perdonado, pero le quiero de lejos,” “le veo y no le saludo,” son actitudes que asumimos frente a quien nos ha ofendido, sin embargo, estamos dándonos por el pecho, sentados en la Iglesia, oramos mucho, hasta predicamos la Palabra con rencores en nuestros corazones. ¡Ah! Y nos ponemos las cenizas.
Un gran gesto de amor hacia tu hermano y una gran demostración de perdón al Señor sería acercártele a quien te ha ofendido haciéndole sentir que le perdonaste, entonces serás un verdadero cristiano, apóstol de Cristo. ¿Cómo?, dirigiéndole la palabra, escribiéndole un mensajito de amor, enviándole un presente, estrechando su mano, dándole un fuerte abrazo, como sea.
Víctor Martínez te invita a la humildad, a dejar el orgullo atrás, a ponerte pequeño para que demuestres tu grandeza, a partir de aquí te sentirás liberado y sufrirás menos.
Nunca digas que hay cosas que no se pueden perdonar, tu y yo crucificamos a Jesús con nuestras acciones y pecados y Él nos perdona cuantas veces sea necesario.
Salva hoy tu propia vida.
Hasta la próxima.